Lectores sin intimidad
Cuando leemos en soportes digitales estamos ofreciendo un montón de pistas y datos: revelamos nuestra intimidad como lectores.
Comprar un libro viejo, recibir el regalo de un libro usado, heredarlo de un ser querido es acceder a la huella que el lector anterior dejó en él. Hay volúmenes que fueron primorosamente forrados para evitar su deterioro, alguien los cuidó con cariño como la verdadera joya que puede ser un libro. Otros conservan anotaciones en los márgenes, enmiendas que no hizo en su día el corrector, pensamientos enigmáticos, dedicatorias solemnes o el simple nombre del propietario… Los hay también que nos sorprenden con un recordatorio de primera comunión, un sello, un recorte de una revista antigua o un ajado pétalo de rosa agazapados tras una página. Una mancha, un olor, una hoja doblada, una caligrafía… son pistas que nos hablan del lector que nos precedió.
La intimidad del lector está en Amazon
Leer en formato digital también deja huella. Ahora las editoriales, los escritores, los libreros, o los colosos como Amazon pueden saberlo todo sobre los lectores. Por ejemplo, qué libros nos gustan, a qué velocidad leemos, qué párrafos subrayamos o cuáles son las novelas más abandonadas, esas que decimos haber leído pero en las que nunca llegamos a la palabra fin.
Y ya no hace falta realizar encuestas, así nadie puede mentir; ahora basta con tener un Kindle o cualquier otro dispositivo electrónico para e-books y el sistema reflejará los datos de nuestros movimientos entre líneas. Por ejemplo, Amazon publica una lista de los libros más vendidos ¡cada hora! Otro caso: la herramienta Popular Highlights, que permite subrayar los párrafos o frases más notables, detecta que si no hay nada marcado en la parte final, es porque el lector abandonó antes de tiempo. Y también: «Porque algunas veces ocurren cosas con las que las personas no están preparadas para lidiar» es lo más subrayado del momento. No es muy profundo, pero parece los lectores se identifican con esta frase de Suzanne Collins en Catching Fire y la marcan masivamente.
En fin, que nos observan y guardan nuestros datos. Supongo que la finalidad es saber lo que gusta para darnos más de lo mismo. ¡Qué aburrimiento!