‘BookTubers’, un fenómeno fascinante
Me gustan los «BookTubers», esa gente que opina sobre libros en YouTube, y consigue tener miles y miles de seguidores.
El crítico de toda la vida, el experto en literatura, el erudito que nos descubre el sentido de una obra, la belleza de un texto, las influencias de un autor, sus errores y aciertos, tiene un papel insustituible en los periódicos y revistas especializadas. Pero hay otros que, sin apenas experiencia ni formación, cuelgan sus opiniones sobre lo que leen y consiguen más audiencia que nadie.
El mundo cambia cada día
Los BookTubers son lectores, generalmente jóvenes o muy jóvenes, que leen libros y libracos, siempre en papel, y cuelgan su opinión en YouTube. La puesta en escena suele ser similar: el chico o la chica se arreglan debidamente y se ponen delante de la cámara a parlotear. Lo habitual es que la grabación se haga en su cuarto, el refugio de todo BookTuber que se precie, y delante de una estantería plagada de libros. Los hay más o menos profesionales en cuanto a calidad de imagen, sonido, iluminación o edición de vídeo, pero todos valen, tanto los que muestran un gran dominio del medio, con cortinillas, música, créditos y recursos gráficos, como los que se graban con su smartphone de cualquier manera; lo que cuenta es lo que dicen.
Estos jóvenes lectores opinan, de manera desenfadada y entusiasta, sobre el último libro que han leído. Dicen por qué les ha gustado, si se identifican con los sentimientos de la protagonista o si el chico de la historia les ha parecido un imbécil. Son sinceros, no ocultan cuando una historia les resulta un truño y no pueden acabarla, o cuando confiesan que por culpa de los exámenes no han terminado de leer el libro que habían prometido comentar para sus seguidores.
Algunos de ellos se han hecho verdaderos fenómenos de masas, y ya los llaman para que acudan a ferias del libro y presentaciones editoriales; vienen a ser los DJ de la literatura. Los editores les envían gratis sus nuevas publicaciones y esperan a ver qué dicen de ellas en su siguiente vídeo, ¡Han descubierto un magnífico canal para publicitar sus títulos!
Estos chicos son valiosísimos prescriptores de libros porque recomiendan a otros chicos lo que les gusta, en vídeos frescos y divertidos, de igual a igual, sin compromisos. Tienen seguidores que los adoran, interaccionan entre ellos, aportan y comparten ideas, y también, claro, se enzarzan o soportan con envidiable fair play los comentarios negativos que algunos les dejan en YouTube.
Por supuesto, la manera de comunicarse con su público es a través de las redes sociales y mediante etiquetas o booktags con los que organizan retos, juegos e información. Por suerte, el fenómeno BookTuber está presente en muchos países y en varios idiomas. Me gusta su trabajo y creo que están haciendo más por fomentar la lectura entre los jóvenes que todas las políticas del libro. Tengo mis favoritos entre ellos, pero no quiero dar nombres, buscad en internet y disfrutadlos, porque ¡son geniales!
