Feria del Libro, la cita del año
La Feria del Libro de Madrid celebra su 76 edición. Para mí es siempre una cita importante que procuro no perderme. Hay que ir.
Para los madrileños, que somos todos los que vivimos en Madrid, la Feria del Libro es un clásico, un acontecimiento al que acudimos en masa, agobiante algunos días y a ciertas horas, pero al que no faltamos.
Muchos van sin intención de comprar, solo para mirar; aunque si aman los libros, alguno caerá, fijo.
Otros llevan su lista de lo que quieren encontrar, las notas que han ido tomando de los suplementos literarios de la prensa, las recomendaciones de un amigo o los consejos de su sitio web de referencia.
Y hay quien va con la excitante idea de caer en la tentación, de sucumbir ante cada guiño que le hagan las casetas de esta inmensa librería que es la Feria del Libro de Madrid.
Todo me gusta
Es bonito ver a los autores que firman, algunos con colas de espera como si fueran estrellas del rock. Otros casi anónimos, ansiosos por que un lector se interese por conocer la obra en la que tanto cariño y dedicación han puesto.
Este año acudo como espectadora, y no a firmar mi última novela, pero la percepción es igualmente atractiva, porque la Feria del Libro tiene sorpresas, actividades, cursos, talleres para visitantes de cualquier edad y afición lectora.
Dicen que en la Feria del Libro de Madrid siempre hace calor y siempre llueve. Hay días para ello: desde el 26 de mayo al 11 de junio.
Entre sus atractivos está también el lugar donde se celebra: el Retiro, uno de los parques urbanos más hermosos que conozco.
Hay razones para ir a la Feria del Libro. La principal es que se trata de una fiesta de la cultura, donde se ensalza su vehículo transmisor: el libro. Pero también que conoces las novedades, ves el trabajo de los editores, hojeas los ejemplares, disfrutas con las portadas, conoces a los autores… y, sobre todo, tienes la feliz impresión de que la gente ama la lectura, por más que las estadísticas se empecinen en afirmar lo contrario.
Para mí, como para muchos, es una cita a la que no falto, una tradición. Y otra tradición de la Feria del Libro de Madrid es que critiquemos el cartel de cada año. A mí me gusta. ¿A vosotros?