La productividad y el entorno laboral
El entorno laboral influye en la creatividad, la concentración, la socialización… e incluso en las emociones. Las organizaciones deben proporcionar lugares de trabajo que permitan a las personas sentirse a gusto, y eso, sin duda, se traducirá en una mayor productividad.
La psicología ambiental es una disciplina que estudia la interacción entre las personas y su entorno. Muchas otras ciencias la tienen en consideración, como la arquitectura, la antropología, la criminología, etc. Por ejemplo, se sabe que el diseño urbano es clave a la hora de proyectar espacios seguros para peatones y automovilistas, para facilitar la socialización o evitar la delincuencia. “El diseño de entornos amigables promueve el bienestar psicológico de las personas” decía S.R. Kellert, y yo también lo creo.
El ambiente que nos rodea también influye en nuestro bienestar. Todos sabemos que no nos sentimos igual cuando salimos al campo, a un viaje que cuando estamos en nuestro hogar. Las emociones no son ajenas a lo que nos rodea, por eso las empresas deben crear ambientes de trabajo propicios si se quiere retener a las personas que trabajan en condiciones de mejor bienestar y, por tanto, de productividad.
En un lugar de trabajo hay que prestar atención a…
Los espacios entre personas
Cuando existe mucha gente en poco espacio se genera estrés. Los psicólogos saben, sabemos, la necesidad de respetar la distancia interpersonal, la privacidad y la territorialidad. Es importante contar con espacio suficiente para sentirse a gusto durante la jornada laboral.
Esto no significa que los equipos no compartan áreas abiertas de trabajo, sino que la densidad no resulte elevada y que existan paneles, mesas y otros recursos que delimiten el área personal.
Buena iluminación
La luz está muy relacionada con la salud; por eso tantos nórdicos viajan cada año al sur de Europa en busca de sol. La luz también tiene que ver con las emociones. Lo ideal sería desempeñar la tarea con iluminación natural, pero lo deseable no siempre es lo posible.
Debe cuidarse que exista una luz principal, un foco dirigible para cada persona, estores y persianas que permitan matizar o desviar los rayos de sol y, a poder ser, habilitar un área de descanso con ventilación natural.
Decoración funcional
Lo bonito y lo feo son cuestiones de gustos, pero la funcionalidad, la limpieza y el orden son factores de bienestar universal. Dependiendo de la actividad, habrá que cuidar que el mobiliario sea ergonómico y prestar atención a los colores, si es posible. Esto crea incluso, un vínculo emocional con la empresa, influir en el estado de ánimo, en la sensación térmica y en última instancia en la productividad.
Silencio, por favor
El ruido afecta a la concentración y a la comunicación provocando estrés y otros importantes problemas de salud. No solo hay que cuidar el aislamiento y la acústica, sino también la educación: hablar bajo, apartarse de la zona de trabajo para tener conversaciones personales, silenciar el sonido de llamada y de mensajes del teléfono, etc.
La temperatura
Es absurdo y nada ecológico que la gente trabaje con manga corta en invierno y con chaqueta en verano. Mantener la temperatura adecuada es un importante factor de bienestar. Todo lugar de trabajo debe ser respetuoso con el medioambiente, reciclar y facilitar que las personas que trabajan ahí no contaminen.
Zonas de descanso
Estas zonas se valoran mucho en las clasificaciones sobre “the best place to work”. Que la empresa ofrezca algún lugar, por pequeño que sea, donde puedan relajarse, desconectar, discutir un proyecto o alumbrar una brillante idea. Esto son motivos de fidelización, de bienestar, de motivación, de orgullo de pertenencia.
La distribución del espacio
Este es un factor altamente influyente del que debe encargarse un profesional. Conviene recordar que hay algo que valoran especialmente los trabajadores: la accesibilidad a sus jefes. Decía R. Kaplan que “la relación del ser humano con su entorno natural tiene un impacto significativo en su bienestar personal” y esto influye directamente en el trabajo.
Se pasa muchas horas en el lugar de trabajo, hagamos que sea un hogar donde las personas se sientan queridas, disfruten mientras se desarrollan profesionalmente y no tengan nunca deseos de marcharse.